Todo porteño o habitante circunstancial de Buenos Aires que teniendo uso de razón en aquella época, haya viajado en tranvía, frecuentado bares o aguardado el comienzo de una función teatral en el hall de la respectiva sala, ha tenido casi con seguridad, ocasión de conocerlo, pero no lo identificarían por su nombre, sino por el latiguillo “Yo la escribo y yo la vendo”.
Había venido a la Argentina en 1912, empleándose en la casa de artículos de lana “La Religiosa”; trabajó como viajante en esa empresa, hasta instalarse con tienda propia en Salta, de donde se trasladó a Buenos Aires en 1926 estableciéndose con una nueva tienda en Independencia y Maza, para mudarse luego a San Juan y Liniers, donde llegaría a tener 8 vidrieras. Tras la revolución de Uriburu en 1930, las cosas empezaron a andar mal y se trasladó a Varela y Avenida del Trabajo, y después a Boedo 1076, entre Cochabamba y San Juan, hasta que en 1936 inició su atípica experiencia editorial que acompañó después colaborando en revistas como “Atlántida” y desempeñándose como corrector de pruebas en los diarios “El Líder” y “La Prensa”.
La atípica experiencia editorial se llamó “La Chispa Cómica”, publicación que en el formato de 18 centímetros x 26 y en un número de páginas que oscilaba entre 8 y 16, incluía un material relativamente variado aunque al recorrer sus páginas aparecía con cierta reiteración la firma de Berenguer, quien para los chistes gráficos acudía a menudo a dibujos de autores extranjeros, a los que creaba un nuevo texto, si bien también solía encargar sus dibujos a algunos colaboradores más cercanos.
Sin embargo, lo más singular de esta “experiencia” era su forma de “distribución”: Berenguer salía a vender su propia revista “desde la Boca a Palermo; de Plaza Mayo a Liniers; de Retiro a Mataderos”, pregonando –tal como lo consignaba el slogan de “La Chispa Cómica”-: “Yo la escribo y yo la vendo”.
En 1946 Berenguer anunció a sus lectores:
“Este número 86 es el último que publico de LA CHISPA COMICA. Diez años y medio de vocearla me han afectado la garganta en forma que me veo obligado a no gritar nada y a hablar lo menos posible y quedamente, si no quiero estropearme del todo.
“Y no pudiendo explotarla en otro plano, para que los demás la vendan, firmo yo mismo su ACTA DE DEFUNCION, no por falta de materia prima, que la tengo y muy abundante, aunque no sé cuándo la publicaré, sino por falta de voz…”
Ya había perdido la voz que le permitiera popularizar “La Chispa Cómica”, y más que el título de la revista, su slogan: “Yo la escribo y yo la vendo”. Ahora estaba empezando –o creía estar empezando, impresionado por la experiencia de un hermano- a perder la vista; y un 1º de junio de 1959 entendió que la vida de un ser humano no difiere mucho de la de una revista hecha con amor, y que en uno y otro caso su continuidad puede depender de una decisión personal…
…2 de junio, hace 54 años: Aparecía la revista “García”. Impresa en papel obra, sin abrochar, con dibujos en blanco y negro sin medios tonos y guardas tipográficas en los recuadros, comenzó apareciendo los lunes pasando después a los jueves. Figura como director Lope de la Barca, seudónimo que algunos de los colaboradores adjudican a Juan Carlos Gianella, quien de todos modos ha ejercido por lo menos, funciones de redacción. Los dibujantes son más fáciles de identificar, ya que no tratan de disimular el estilo, y si han evitado firmar como lo hacen en otras publicaciones, ello más bien se debe a que las características gráficas de “García” podrían originar un equívoco haciendo suponer que se trata de uno de los tantos pasquines que circulan por entonces. Pero los chistes gráficos que aparecen en esta publicación no difieren básicamente de los que esos mismos autores hacen en “Tía Vicenta”.
“García” acusa ciertas preferencias, como surge en una de las tapas en que aparece Perón haciendo un guiño, en tanto se muestra al flamante presidente Frondizi como un ser débil entre dos colosos que representan al peronismo y al gorilismo.
Entre los colaboradores figuran Naser (Arnoldo Franchioni), Chucrut, Kiko, Quique (Eugenio Cilento), Salomón, Nowens, Alejo, Irañeta, Alberto Robledo, Reyes, y Batista.
…3 de junio, hace 86 años: Fallecía Diógenes Taborda. Conocido en los medios donde actuó, como el “Mono” Taborda, este caricaturista entrerriano llegó a Buenos Aires en 1911, recalando en el diario “Sarmiento”, aunque su popularidad comenzaría al ingresar a “Crítica”, donde tuvo gran éxito su sección “Hípicas”, recopilada después en albumes que tituló “Monos de Taborda”. Taborda fue también el autor de los bocetos de “El Apóstol”, película de dibujos animados realizada por Quirino Cristiani. Desde su muerte, una calle de Buenos Aires, de pocas cuadras, lleva su nombre a manera de homenaje, una resolución justiciera que lamentablemente no se volvió a repetir después con otros dibujantes que también lo hubieran merecido.
…5 de junio hace 107 años: Nacía en Alessandria Bartolomé Mirabelli. Habiéndose iniciado como aprendiz de tipógrafo, pasó por “Caras y Caretas” y llegó al diario “Ultima Hora” haciendo caricaturas.
“Don Goyo” lo contaba entre sus asiduos colaboradores cuando muy joven todavía, Bartolomé Mirabelli llegó a “Crítica” con dos excepcionales “padrinos”: Conrado Nalé Roxlo y el “malevo” Muñoz, quienes a su vez lo pusieron bajo la tutela del gran “animador de la muchachada artística” de la década del 20: Ricardo Parpagnoli. Este alentó en forma extraordinaria a quien habría de ser más tarde uno de los grandes dibujantes de “Crítica”.
Así fue que a partir de 1926 con sus ilustraciones de líneas absolutamente distintas a las habituales hasta ese momento, la popularidad de Mirabelli creció prontamente. Poco tiempo después, invitado por Alejandro Sirio, se integró a “La Nación Magazine”, ejerciendo por esa misma época la dirección artística de la revista teatral “Máscaras”.
El teatro lo ganaría finalmente, pero como decorador, actividad a la que se volcó en la década del treinta después de haberse dedicado también a la publicidad en agencias memorables como “Pum… en el ojo”.
…6 de junio, hace 27 años: Fallecía Juan Angel Sagrera (Tinco). Nacido en las proximidades de Rosario, llegó a Buenos Aires a mediados de la década del cuarenta, incorporándose a la revista “Patoruzú” –a la que años después aportaría su personaje Babilonio y la sección Vista Visión-, interviniendo a la vez, en la revista “La Cancha”, junto al dibujante Eduardo Ferro.
Colabora además, por esa época, en la revista “Tibor Gordon” –donde ilustra Lucocito, firmando Fabri-, creando un tiempo después a Maserato, que publica en forma de tira diaria en las páginas del vespertino “Crítica”.
Luego, con el seudónimo de Tinco, colabora en “Pobre Diablo” y “Sucedió con la Farra”, incursionando también en “Poncho Negro” y “Ricuritas”.
Cuando en setiembrte de 1953 funda “Dibujantes”, fija a la revista lineamientos que fueron respetados aún cuando él no siguió al frente de la misma; esta revista constituye un testigo insoslayable del período que abarcó su existencia. Cabe acotar que a través de sus páginas de “futuros profesionales” se conocieron los primeros dibujos de humoristas como Joaquín Lavado –quien posteriormente adoptaría el seudónimo de Quino-; Gregorio “Goyo” Mazzeo, y Alfredo Grondona White, entre otros.
Paralelamente con su tarea de editor y sus funciones en “Patoruzú”, Sagrera recreó en forma de historieta a La familia de Pancho Argüello, de Billy Kerosene (Luis A. Reilly), para la revista “Avivato”, de la que este último era coeditor.
Un año después, sobre guión de Héctor Germán Oesterheld, dibujó Deportito, en “Super Deportito”, y también colaboró en “Rico Tipo” y en su libro de Fin de Año, asociándose posteriormente con Mariano de la Torre, en la primera revista especializada en televisión, que introducía además, una característica novedosa: las tapas traían caricaturas de la figura más destacada de cada semana, estando las mismas a cargo de Abel Ianiro.
A mediados de la década del 60, Sagrera se retira de “Canal TV” –a la que volverá después como propietario absoluto, aunque por poco tiempo- editando “Pantalla Chica”, también especializada en televisión; allí aflora nuevamente el dibujante humorístico, surgiendo la historieta Me sentencia mi conciencia, una de las que más lo conformaron.
Tres años después reinicia la actividad editorial a través de una revista de historietas humorísticas: “Godofredo”, cuyo personaje central es un chico de ese mismo nombre, creado por él antes de abandonar totalmente el dibujo para dedicarse a las actividades comerciales, aunque sin apartarse del negocio editorial, al que ya había brindado un importante aporte como dibujante, no solo con los trabajos antes mencionados, sino también con otros que no llevaron su firma, como Trencitas, Virola, Cuatroqui, Pajuera y Rin-Tin-Ton, que sobre idea de León Benarós, dibujaba para la revista de éste, “Medio Litro”, conjuntamente con Osvaldo Camblor; y algunos aparecidos en publicaciones zonales, como Yurupeté, que sólo se conoció en una parte de la provincia de Corrientes.
…7 de junio hace 53 años: Fallecía Julio Castellanos. Ingenioso redactor que popularizó el seudónimo de Goyo Cuello en “Caras y Caretas”, revista en la que llegó a ser secretario de redacción. Había nacido emn Madrid, España, en 1873 y llegó a la Argentina cuando tenía 12 años de edad, iniciándose desde muy joven en ese periodismo satírico e incisivo, destacándose por la agilidad de su estilo y por el gracejo de su producción.
Se lo señala como el descubridor del dibujante Alejandro Sirio, a quien “descubrió” haciendo carteles de propaganda para el escaparate de la Sastrería Inglesa.
…8 de junio, hace 107 años: Nacía, Máximo Aguirre. Ganado posteriormente por la radio, el cine, la televisión y el teatro, Máximo Aguirre debe sin embargo, su “despegue” como humorista a una sección que comenzó a publicarse en “Noticias Gráficas” en 1932.
Habiendo participado en un concurso de epígrafes para ciertas fotos publicadas por el mencionado vespertino, triunfó entre 4.000 aspirantes, obteniendo 500 pesos y el ingreso como periodista, iniciando una sección titulada “4 líneas”, donde bajo el seudónimo No Deje de Leerme, tomaba los cables en broma, con ilustraciones de Divito.
Un día leyó una de esas humoradas Tito Martínez del Box, quien considerando que el autor de las mismas era la persona indicada para escribir el programa que él tenía pensado tomando como base “Los Bohemios” de Mario Pugliese “Cariño” (el éxito radial de aquel momento), mandó llamar a Aguirre, para dar forma entre ambos a “La Gran Cruzada del Buen Humor”, que en 1948 sería llevada al cine con el título “Cuidado con las imitaciones”.
Después se produciría la escisión del libretista y cinco de sus animadores principales, surgiendo “Los Cinco Grandes del Buen Humor”.
Sin embargo, Máximo Aguirre nunca se apartó del todo del humor periodístico, haciéndose tiempo para colaborar por lo menos, en publicaciones de la zona donde residía.
Aguirre ha dicho en distintas oportunidades que “se siente orgulloso como gauchista, y no pretende ser humorista”; sin embargo ha logrado conciliar ambas cosas, primero a través de “Los canejos del viejo Viscocho”, que publicaba en el periódico zonal “Noticiero Ituzaingó” y después mediante “Hormiga Violeta” que con ilustraciones de Pedro Seguí publicó en la revista “Humorón”.
Más allá del humor, los temas históricos siempre han atraído a Aguirre, lo que lo llevó a ironizar: “Mi afición a las cosas históricas es tan acendrada, que uso siempre los chistes viejos”.
Aguirre había nacido en Flores al sur, y era hijo de un resero de los Corrales Viejos, lo cual justificaría su gran pasión por los caballos criollos.
'Temas Porteños' por Rodolfo Claro
…10 de junio, hace 28 años: Fallecía Rodolfo Claro (Mico, Rene Foly) Nacido en Buenos Aires a comienzos del siglo XX, inició su labor periodística en 1923, haciendo sus “primeras armas” en “Páginas de Columba”, ingresando posteriormente como ayudante en “El Suplemento” y “La Novela Semanal”, donde en poco tiempo pasó a realizar ilustraciones y las portadas, muchas de ellas con espontáneo humor.
Luego actúa en las revistas “El Hogar”, “Mundo Argentino” y “Patoruzú”, donde a partir del Nº 3 se hace cargo de la historieta Ellos, realizándola en un estilo semihumorístico que después continuarían José L. Salinas y otros dibujantes.
Claro firmaba esa historieta con el seudónimo de René Foly, utilizando eventualmente los de Factotum y Mico para firmar otros dibujos, como algunos para la sección “Temas Porteños”.
Buscando documentación para sus ilustraciones, comenzó recorriendo la Argentina desde La Quiaca hasta Tierra del Fuego, haciendo otro tanto por países de América y Europa.
Rodolfo Claro también ha colaborado en “La Nación”; “Selecta”; “PBT”; “Caras y Caretas”; “Clarín”; “El Día”, de La Plata; “El Día”, de Montevideo, y en otros medios del Uruguay, Bolivia y Chile.
En sus comienzos realizó algunos trabajos publicitarios, abandonando luego esta especialidad.
…11 de junio, hace 78 años: Aparecía Mandrake, el mago (Mandrake the Magician, en su versión original). Creado por Lee Falk y con dibujos de Phil Davis, comenzó a publicarse en el “New York Journal American”, conociéndose en Buenos Aires 9 meses después, a través de la revista “El Tony”, a la que siguieron numerosas publicaciones. Cabe recordar que en el Magazine Multicolor de Aventuras de “Crítica”, se lo conoció con el nombre de Solimán el mago.
…11 de junio, hace 53 años: Aparecía “Cosquillas”. Este semanario “escrito por humoristas de primera risa” que se vendía a 3 pesos –“Más barato que un tomate”, según sus editores- era dirigido por Osvaldo Nicolás y la Secretaría de Redacción estaba a cargo de Julián Centeya. Entre sus redactores figuraban Jordán de la Cazuela, El Licenciado Vidriera, Carlos Schaefer Gallo, Ramón Gómez de la Serna, Roberto Gil, Francisco Cano Carreras, Mauricio Grinberg, Piolín de Macramé, César Tiempo, Mario Román de Flores, Vizconde de Lascano Tegui, Eliseo Montaine, Ernesto Bustamante, El Bachiller y Federico López Cruz –que lo hacía como redactor y dibujante-; los dibujantes eran Mazzone, Liotta, Borello, Pedro Seguí, Filip, Garaycochea, Siulnas, Héctor, Molas, Fantasio, Sarlo, Lubrin, Ferrero, Torino, Cilento, Helso, Rubens, Jorge Toro, Irañeta, Mariano, Peña Plata y Alfredo Olivera.
En el primer número se señaló entre otras cosas:
“Somos humoristas, lo que ya es decir: una cosa seria. Y quedamos en que no venimos a llenar nada. Ni a nadie. Sólo que, al viento de la mejor esperanza, remontamos hoy la tarasquita limpia y sana de ‘COSQUILLAS’. Ojalá no nos falte piolín”.
Pero faltó; “Cosquillas” no llegó al sexto número.
…12 de junio, hace 44 años: Aparecía “Tío Landrú”. Esta publicación de Editorial Primera Plana SRL apareció bajo la dirección de Landrú, presentándose como “La única revista que anda bien cuando las cosas andan mal”. El conocido dibujante intentaba por tercera vez hacer humor político durante el gobierno de Onganía, contando con la colaboración de sus colegas en el dibujo Herman, Vilar, Manucho, Faruk, Caloi, Irañeta, Basurto, Ceo, Brunetto (Lino Palacio), Werffeli, Aldo Rivero, Lembó, Selbor, Fantasio, Siulnas, Góngora, Kóper, Drácula, Fontanarrosa, Aranda, Gorla, Pratico, Félix, Suar, Pan Duro (Jorge Limura), Egmont, Brummel, Lombar, Fontana, Juan Dalera, Quinloles, Lovato, Maco, Caperoxipi y Lufrano, y de los humoristas redaccionales José Giribaldi, Armando Chulak, Hipólito Pi, Cerino, Acido Nítrico, Marcos Martínez, Aldo Cammarota. Gusano de Nailon, Lucho, Pericles, Gudiño Kiefer, Hózkra, Paquito Contreras, Castellano, Ecorfe, Filibabuscio Perengüile, Lawa, Caín Maldito Rombo, Anastasio Arlen y Daygon.
Entre las características gráficas de esta revista cabe destacar el recurso de la tapa continuando en la contratapa, donde se efectivizaba el chiste correspondiente sorprendiendo al lector con un remate de la situación distinto al que podía imaginar. Esta modalidad practicada con éxito por “Cascabel” más de veinte años atrás, se mantuvo con pocas excepciones hasta el Nº 47, en que Onganía aparece junto a un receptor de radio donde se anuncia “Tío Landrú no aparecerá más”; era cierto y en el editorial se explicaba por qué.
…13 de junio, hace 104 años: Nacía Néstor René González Fossat. Uno de los dibujantes más prolíficos surgidos en la década del 20 del siglo pasado, comenzó su carrera profesional tras enviar desde la localidad bonaerense de Azul –su ciudad natal- dibujos a una revista que lo premió con una libra esterlina. Entre los personajes más populares de González Fossat –que comenzó publicando Jimmy y su pupilo en “Páginas de Columba”- figura Calixto Campolargo, publicado durante muchos años en “Maribel”, siendo el último de una larga serie, Vagonio, publicado a partir de 1956 en “La Razón”.
Caricatura por Columba
…13 de junio hace 53 años: Fallecía Ramón Columba. Había nacido en Punilla (Córdoba) el 3 de diciembre de 1891, aunque ya sus estudios primarios le tocó hacerlos en una escuela de la Capital Federal, “aporteñándose” totalmente, como surge de la observación de sus apuntes rápidos ejecutados al carbón, pincel y aguada.
Columba fue retratista antes que caricaturista, provocando la admiración del pintor napolitano Eugenio Limarzi, que se desempeñaba como profesor de dibujo en los grados primarios. Entre los retratos más recordados de aquella primera etapa de su vida, figura el del Dr. Carlos Pellegrini.
Precisamente, por ser un retratista, Columba no aceptaba la creencia de muchos, de que “uno se presta para la caricatura cuando tiene nariz grande o chica, o los ojos abiertos o pequeños, o ‘dos dedos’ de frente, o el mentón entrado, o alguna desarmonía”.
“La caricatura no depende de la fealdad o la belleza”, afirmaba, “sino de que uno tenga ‘personalidad’, ‘particularismo’, ‘carácter’, algo que nos individualice. Encontrar ese ‘algo’ es el milagro de este arte de la caricatura”.
Antes de los tres tomos de “El Congreso que yo he visto”, que recogen sus observaciones como taquígrafo del Senado de la Nación entre 1907 y 1946, publicó entre otros: “Album de foot-ball”, con 250 caricaturas de deportistas, en 1916; “Album de la guerra”, en 1919; “Apuntes del debate” (caricaturas parlamentarias), en 1921; “Perfiles pacifistas” (apuntes de los asistentes a la Conferencia Interamericana de Consolidación de la Paz, presidida por el ex presidente de los Estados Unidos de Norteamérica F. D. Roosevelt), en 1936; y “Un debate en el Senado”, que apareció en 1942.
A partir de 1922, cuando inició “Páginas de Columba”, brindó su aval a todos los lápices noveles y publicó los primeros trabajos de Dante Quinterno, Divito, José Luis Salinas, González Fossat, Iribarren, Tabernig, Muñiz, Cotta, Linage y Valdivia.
Antes, en 1917, había ganado la calle Florida, donde se instalaron en varias esquinas unas pantallas de proyección luminosa que con el título “Pelele y Columba” pasaban noticias y caricaturas, las que hacía junto con el dibujante uruguayo Pedro Ángel Zavalla, conocido por su seudónimo de Pelele.
Ya en 1939, como aún no había televisión, comenzó a hacer caricaturas para el cine a través de “Sucesos Argentinos” que lo contó hasta 1946.
Desde 1911, en que publicara sus primeros trabajos en “Vida Moderna”, Ramón Columba no dejó de dibujar hasta 1959, año en que falleció, tres meses después de haberse terminado de imprimir su libro “Qué es la caricatura”.
…el 15 de junio hace 152 años: Aparecía “El Trueno”. Diario crítico que se presenta “con cejas arqueadas, pierna tendida, mano en la cadera, galera a la nuca con garbo, frac raído y embetunado, pantalón de ay de mí! Garrote de coscorrones y Dios te libre! Corbata de dogal, cara de hambre y tercianas, uñas negras, zapatos desvergonzados y pucho en la oreja”.
Recién a partir del tercer número incluye algunas caricaturas ilustrando los textos, aunque obviándose los nombres propios que se reemplazan por apodos tales como D. Plácido, D. Zopenco y otros.
…15 de junio hace 25 años: Fallecía Silvio Baldessari. Pintor, ilustrador, humorista y diagramador, ya allá por 1938, con sus jóvenes 22 años, entretenía a los chicos de entonces desde las páginas de la revista “Figuritas”, para la que realizaba la historieta Tiro; ya para entonces había colaborado en la hoy legendaria revista “Berretín”. Entre sus posteriores personajes se cuenta Horóscopo, que en 1957 publicó en la revista “Predicciones”.
Cultor del chiste mudo, en 1972, los reunió en un libro editado por Losada titulado “Sin blabla”
El Corto Maltés
…15 de junio, hace 85 años: Nacía Hugo Pratt. Nacido en Rimini (Italia), cerca de Venecia a la que se trasladaría en 1943, tras diversas vicisitudes, Hugo Pratt arribó a la Argentina a los 23 años, contratado por Editorial Abril para colaborar en sus revistas de historietas, dibujando entre otros personajes, Ray Kitt y el Sargento Kirk, guionadas por Héctor Germán Oesterheld, en cuyas publicaciones sería uno de los dibujantes de Ernie Pike y Ticonderoga. Nuevamente en Europa, se abocó a la realización de Corto Maltés, el personaje con el que más se lo identifica en la actualidad.
Fuente SIULNAS / Historiador